La implementación de la inteligencia artificial (IA) en diversos sectores económicos de Colombia ha experimentado un crecimiento significativo desde 2022, según estudios recientes del DANE. El sector de la construcción lidera con un 63% de adopción, seguido por el comercio (48%), servicios (42%) e industria manufacturera (38%).
El uso más destacado de la IA se observa en mercadeo y ventas, impulsado por la situación económica post-pandemia. Esto incluye chatbots basados en procesamiento del lenguaje natural para servicio al cliente, seguimiento de tendencias en redes sociales y análisis de mercado mediante aprendizaje automático.
Andrés Waldraff, gerente de Ágata, Agencia Analítica de Datos, señala: «Uno de los principales retos que enfrentan las empresas en la actualidad es la falta de conocimiento y capacitación de los empleados para desarrollar y aplicar la IA de manera efectiva. La inteligencia artificial es un campo en constante evolución, lo que implica que los profesionales deben capacitarse constantemente. Sin esta formación continua, las empresas corren el riesgo de quedarse atrás en la carrera tecnológica y perder ventajas competitivas cruciales en el mercado actual.»
Desafíos clave en la implementación de la IA
1. Calidad y gestión de los datos
La IA requiere grandes volúmenes de datos de alta calidad para funcionar eficazmente. Sin embargo, muchas empresas carecen de información suficiente o no la tienen adecuadamente estructurada. Waldraff enfatiza: «Es crucial garantizar que los datos sean de alta calidad y estén actualizados para que se puedan proporcionar resultados precisos. En el mundo empresarial, la calidad de los datos que alimentan tus sistemas de IA puede ser la diferencia entre tomar decisiones estratégicas acertadas o cometer errores costosos. Invertir en la gestión y calidad de los datos no es un lujo, es una necesidad estratégica en la era de la IA.»
2. Privacidad y ética
El uso de datos confidenciales en la IA plantea serias preocupaciones sobre privacidad y seguridad. Las empresas deben implementar políticas robustas de manejo de datos antes de adoptar estas tecnologías.
Waldraff advierte: «No es malo usar herramientas de IA generativa, después de todo es el futuro y las empresas que no se adapten quedarán rezagadas. Lo que es poco ético con el público y potencialmente dañino para la reputación de la empresa es no ser transparentes sobre su uso. La confianza del consumidor es un activo invaluable en la era digital, y la transparencia en el uso de IA puede convertirse en un diferenciador clave en el mercado.» Además, subraya la importancia de contar con equipos multidisciplinarios para abordar la discriminación algorítmica y evitar la toma de decisiones automatizada sin supervisión humana. «Las organizaciones deben esforzarse por usar la IA de manera responsable para garantizar su éxito y aceptación, que depende en gran medida de la confianza que generen al proteger la privacidad y los derechos humanos de las personas», añade.
Ágata ha asumido un papel proactivo en el manejo ético y seguro de los datos. La agencia ha implementado rigurosos protocolos de seguridad de la información, además de evaluaciones a cada proyecto para asegurar el cumplimiento de estándares éticos en el uso de la IA. En su trabajo con entidades públicas y privadas, Ágata promueve la transparencia, abogando por la divulgación clara del uso de IA en los servicios ofrecidos.
3. Adopción y adaptación:
La introducción de la IA puede transformar radicalmente los procesos de trabajo, lo que a menudo genera resistencia entre los empleados. La clave para superar este obstáculo es la educación continua.
«La IA y lo que puede hacer está mucho más allá de chatbots y aplicaciones con inteligencia generativa. Estamos hablando de sistemas capaces de optimizar cadenas de suministro, predecir tendencias de mercado con una precisión sin precedentes, y personalizar la experiencia del cliente a un nivel que antes era imposible. Las empresas que logren implementar estas capacidades de manera efectiva estarán en una posición privilegiada para liderar sus respectivos sectores en los próximos años.», explica Waldraff. «La formación constante es fundamental para que los profesionales puedan acceder a nuevas soluciones y adaptarse a los cambios». Las empresas deben invertir en programas de capacitación y trabajar en estrecha colaboración con sus empleados para lograr una adopción exitosa y una comprensión profunda de estas tecnologías.
Para enfrentar estos desafíos, muchas organizaciones están recurriendo a aliados estratégicos como agencias analíticas especializadas. Estas colaboraciones permiten a las empresas aprovechar al máximo las innovaciones tecnológicas, navegando con éxito por los complejos desafíos que plantea la implementación de la IA en el entorno empresarial colombiano.